"Yo soy hijo de vencedores, no escribo con ánimo de revancha, es el sentido común el que me lleva a repeler el crimen, la violación, la tortura, el abuso desde el poder con desprecio absoluto por la vida, entonces, ahora y siempre. Es la única posición decente, lo demás es ruin, miserable. No hay que mirar el carné a los muertos para comprobar que son de los nuestros antes de calificar un crimen."
Esto es parte de lo que escribe El Gran Wyoming en su columna dominical (o blog) de ayer domingo. No hace falta comentar.
