Como si de un caso de conexión extrasensorial se tratara, ayer se me ocurrió ir al sitio Web de Aimee Mann a ver por dónde andaba y, mira tú por donde, me encuentro con que ese mismo día 3 de junio se lanzaba su nuevo álbum (hablar de disco a estas alturas es absurdo). El título: @#%&*! Smilers. Por lo que he podido oír de él por aquí y por allá, más de lo mismo; lo cual, en este caso me parece estupendo. Aimee Mann siempre suena a Aimee Mann; y, por mí, que no le dé por sonar a otra cosa.
Igual que Joni Mitchell, que siempre suena a Joni Mitchell (inconmensurable Joni Mitchell), de la que por cierto, llevo meses queriendo hablar. Sobre todo de su último álbum, Shine, que se hizo público hace meses y que incluye el largo tema del mismo título, canción que es posiblemente una de las mejores cosas que ha hecho esta mujer, que ya es decir (en este vínculo se pueden oír extractos).
Y como anécdota, estas son las dos portadas de dicho disco. La de la izquierda es la original. La de la derecha, la que apareció más tarde en diversas paginas de información o venta de EEUU. Juguemos a las 10 diferencias:
Ríete tu del Juicio Final de la Capilla Sixtina y su colección de taparrabos.